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La Ruta de la plata cruza la península desde Sevilla a Gijón y sigue, prácticamente al dedillo en su tramo central, la antigua calzada romana entre Augusta Emerita (Mérida) y Asturica Augusta (Astorga), una de las más importantes vías de la Hispania Romana.
A pesar de su nombre, la Vía de la Plata nunca se utilizó para transportar este metal precioso. El nombre viene de una confusión en torno al nombre de la vía en época andalusí, cuando los árabes la bautizaron como al-Balat (el camino empedrado). En algún momento, se empezó a confundir al-Balat con la palabra “plata” y, ya desde el siglo XVI, se empezó a conocer como la Vía de la Plata.
Cuestiones etimológicas aparte, lo cierto es que la Ruta de la Plata es una gozada de carretera que pasa por localidades de la importancia de Gijón, Oviedo, Mieres, León, Benavente, Zamora, Salamanca, Béjar, Plasencia, Cáceres, Mérida, Almendralejo, Zafra y Sevilla.
Pocos itinerarios pueden presumir de una riqueza natural tan excepcional como la que aquí presentamos. Una ruta que, uniendo Sevilla con Gijón a lo largo de todo el oeste peninsular, mostrará al viajero lugares de insólita belleza y biodiversidad poco común que se plasman en hábitats casi intactos, allí donde el tiempo parece haberse parado, bosques densos de clima atlántico, verdes prados donde el ganado pasta libre, o paisajes extensos como las dehesas, donde el bosque mediterráneo ha sido transformado con los siglos en ecosistema autóctono.
Un recorrido donde la mirada del viajero podrá sentir la intensa variedad de paisajes que posee el norte y el sur peninsular. Hayedos, castañares y robledales que tiñen el otoño de colores mágicos, montañas nevadas de un blanco intenso, dehesas de serenas formas, llanuras donde la vista se pierde en la lejanía, bosques espesos y sombríos, lagunas de aguas sosegadas o ríos que descienden veloces, creando formas sinuosas en la piedra erosionada… Fauna y flora endémica que desde el urogallo de los montes asturianos al flamenco de las marismas andaluzas, o desde el haya del húmedo norte hasta el olivo del soleado sur, el visitante podrá sumergirse en lugares de sorprendente belleza.
La Ruta Vía de la Plata invita a adentrarse en sus raíces más remotas, las que surgen de una naturaleza viva, diversa, diferente, que muestra al viajero sus múltiples paisajes conforme se avanza en el recorrido. Sin embargo, las propuestas que aquí se muestran son sólo una pequeña parte de la inmensa biodiversidad que existe en este fascinante y ancestral itinerario. Esperemos que disfruten de un viaje por más de 800 kilómetros de diversidad natural.
Aprovechamos esta ruta para hacer unos recorrido en avión de pistón o helicóptero que siga, más o menos, el itinerario.
Lógicamente debemos apartarnos de la ruta original para ir a los aeródromos pertinentes, pero ello no quita belleza ni interés.
Son 15 etapas cortas (la más larga es de 57 nm en línea recta). Recomiendo, por la longitud de las etapas, hacerlas a mano, a poca altitud, y por sitios interesantes y curiosos. Cada piloto decide.
No fiarse de los aeródromos. Los hay de muy cortos...y camuflados.
Se incluyen varios documentos pdf, bajados libremente de la página web original, donde hay abundante información añadida de esta ruta y de las cosas que se pueden ver, hacer o comer en la misma.
Instrucciones:
Realizado por:
Albert Galobart Roca (ALZ880)
Vie, 26/07/2024 - 09:54 | 
ALZ880